Una mujer que haciéndose pasar por hombre llegó a ser papisa y terminó delatándose al ponerse de parto en plena procesión delante de cientos de personas. Es la curiosa historia de Juana, una leyenda muy extendida y documentada entre los siglos XII y XVI. Ahora que el nuevo papa León XIV acaba de ser elegido ahondamos en este curioso bulo que dio lugar a otros después.
Publicidad
Con el paso de los siglos se ha sabido que no fue real. Esta historia narra que Juana nació en el año 822, era muy inteligente y, sabiendo que por ser mujer no podría estudiar, se hizo pasar por hombre. Así, como Juan, acabó en Roma, en el Vaticano, donde por su brillantez la nombraron secretaria de asuntos internos por el papa León IV.
La leyenda cuenta que, cuando el sumo pontífice murió, nombraron a Juana, creyendo que era en realidad Juan. Pero después de dos años se quedó embarazada y la historia dice que se puso de parto en plena procesión, delante de cientos de personas. Ahí se dio cuenta todo el mundo de que Juan era Juana, una impostora.
Hoy se sabe que se trata de una fabulación, que esta historia no tiene ninguna base real pero también se sabe que esta leyenda creó otra posterior: se hizo una silla con un agujero en la que la persona que fuese a ser papa debía sentarse obligatoriamente para que alguien comprobase que era realmente un hombre. A pesar de lo disparatado de la historia, durante décadas se creyó real aunque, afortunadamente, se acabó confirmando que no tenía ninguna base sólida.
Disfruta de acceso ilimitado y ventajas exclusivas
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.